domingo, 18 de enero de 2009

¿EL HOMBRE ES INFIEL POR NATURALEZA?


Algunos especialistas sostienen que las causas de la traicion masculina se basan en la teoría biológica instintiva humana. La idea sugiere que la traición masculina, se debe en parte, a la hormona testosterona, encontrada en mayor cantidad en el hombre. Esa hormona, en niveles elevados, hace que los hombres presenten comportamientos más impulsivos y agresivos.
Esos hombres, con altos índices de testosterona, tienen probabilidades mayores de buscar placer en varias mujeres fuera del casamiento. Tales hombres, presentan un fuerte impulso de libertad, conquista y de perpetuación de la especie.
Las mujeres que se casan con hombres de comportamiento impulsivo y agresivo, por un lado, tienen buenas posibilidades de tener un buen amante en casa, pero al mismo tiempo, aumenta la posibilidad de que esos mismos maridos presenten una conducta más voluble fuera del casamiento.
Y los hombres más pasivos y caseros, en general son amorosos con sus esposas, les gusta de quedarse en la casa, disfrutan del hogar y buscan intercambios afectivos con sus esposas, basados mucho más en el compañerismo y amistad que en el sexo.
Y las mujeres que se casan con hombres con esas características de mayor tranquilidad frente a la vida, tienen posibilidades de establecer una unión prolongada, formando relaciones más estables. Por otro lado, pierden un poco de la seducción y magia sexual de la pareja.
Hombres que tienen una naturaleza más coqueta, difícilmente consiguen cambiar ese comportamiento, independiente de ser casados o solteros. Algunas mujeres tienen la esperanza de que con el casamiento ellos acaben siendo más tranquilos, transformándose en maridos fieles.
¿Pero al final por qué entonces esos hombres traicionan? ¿Por que repiten tales comportamientos sabiendo que podrá traer problemas a su casamiento?
Existe una fábula que habla sobre un escorpión que quería atravesar un río.
“El escorpión, como no sabía nadar, le pidio a un sapo que atravesase el río llevándolo en su espalda.
El sapo al principio estaba desconfiado, pues temía recibir una picadura, pero luego concluyó que eso sería imposible, pues así ambos morirían, ya que el escorpión necesitaba de el para llegar al otro lado de la ribera.
Cuando estaban en medio del trayecto, el escorpión sin conseguir controlarse, lanzó una picadura al sapo y éste al percibir que estaba muriendo, pregunta:
- ¿Pero por qué esto, si tu también vas a morir?
Y aquí está lo que el escorpión responde:
- No consigo controlarme, esa es mi naturaleza.”
Esta es apenas una de las tantas teorías que buscan entender el comportamiento de la falta de fidelidad que afecta a ciertos hombres.
El asunto es mucho más complejo, envolviendo varias cuestiones que incluyen factores culturales, sociales, biológicos y sicológicos.

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